“Juntos por la humanidad” – Organizado por el Movimiento Humanidad Nueva, el Centro para el Diálogo con la Cultura Contemporánea y las ONGs New Humanity y Asociación Mundo Unido (AMU), se realizó del 16 al 19 de mayo en Castel Gandolfo, Roma, este congreso internacional que tuvo como eje central la paz.
Por la secretaría de Humanidad Nueva y el Diálogo con la cultura
¿Qué es la paz?, ¿cuál sería el camino para lograrla?, ¿cómo se construye una paz justa y sostenible? Disparadores de un congreso que comenzó con un dato contundente: vivimos en un planeta en el que hay 114 conflictos en 38 países diferentes y donde hay jóvenes que desconocen lo que es vivir en paz, ya que sus naciones siempre estuvieron en guerra. Por eso es clave ver a la paz como un concepto holístico, que involucra diversas áreas como el medio ambiente y desarrollo. En este sentido, no existen guerras locales, ya que de alguna manera afectan globalmente y para lograr la paz es imprescindible vencer antes las injusticias.
Experiencias y testimonios de los más variados dejaron de manifiesto que las desigualdades sociales son generadoras de conflictos. También que los fracasos se convierten en oportunidades para regenerar confianza, trasmitir valores y esperanza, ingredientes clave para la paz.
El profesor Vincenzo Buonomo, Consejero General del Estado de la Ciudad del Vaticano y Rector Emérito de la Pontificia Universidad Lateranense, fue crítico de este presente y aportó una reflexión: “Todos los estados están invirtiendo en armas. Vuelve la idea del conflicto como solución de paz. Las guerras cambiaron el escenario. Hay una nueva manera de comprender las relaciones internacionales. Hay un nuevo multilateralismo. Las fronteras están basadas en la capacidad de relacionarse y hoy las decisiones no están solamente en manos del estado sino, por ejemplo, de agentes económicos financieros. Tenemos que estar formados, estar dispuestos a tener una función importante, a generar un efecto multiplicador. El diálogo debe ser una metodología, no más un instrumento”.
Cada intervención, cada testimonio, también el de una adolescente en su vida cotidiana, fueron una invitación a ser “embajadores de paz”, título que recibieron algunos jóvenes participantes. “El mundo no terminará con una guerra, nosotros podemos ser verdaderamente una ayuda concreta para quien tiene necesidad”, comentó uno de ellos.
El evento concluyó con la participación de Margaret Karram y Jesús Morán, presidenta y co-presidente del Movimiento de los Focolares, respectivamente. Karram hizo énfasis en construir relaciones verdaderas. “La paz no es ausencia de guerra, se necesita estar juntos en comunidad. El conflicto es parte de nuestra vida cotidiana, es un proceso, un camino, pasar de la guerra a la paz. Para hacer un bordado se necesita el punto cruz, con paciencia, perseverancia, punto a punto. ¡El camino de la Paz nace siempre de una convicción! La paz es el diseño de Dios sobre la humanidad, y nosotros debiéramos ser colaboradores. ¡La Paz tiene la necesidad de perder algo, para ganar algo más grande! Para alcanzar la paz, el camino es la fraternidad.
En tanto, Morán aseguró: “Nos llevamos una certeza, que Jesús ha enviado el Espíritu para cambiarnos, a todos. Falta mucho Espíritu. Servir para recibir el don de la profecía. Hoy hay necesidad de profetas, gente que ve donde la humanidad debe andar. Sólo el Espíritu puede darnos el don de la profecía. Si el Espíritu opera en nosotros, si lo acogemos, daremos Gloria a Dios y alcanzaremos la Paz. El Espíritu, ¡como sabiduría, inteligencia, fortaleza! Pidamos el Espíritu Santo para transformar el mundo, solos no lo logramos” •