Experiencia – En Paraguay, el Centro Mariápolis llevó adelante una propuesta concreta para intentar limitar la producción de residuos y de basura que no pudiera ser reutilizada.
En el marco de EcoPlan, lanzado en junio de este año y cuyo objetivo es inspirar a que las persona vuelvan a pensar estilos de vida para una relación sana con el medioambiente, se llevó adelante una iniciativa en el Centro Ñande Mariápolis, en Paraguay.
El lugar cuenta con espacios verdes que albergan diversos tipos de eventos y, como tales, son potenciales generadores de impactos negativos a nivel económico, ambiental y social.
Por eso, para minimizar estas consecuencias, es fundamental una gestión adecuada del flujo de materiales. Por esta razón, Ñande Mariápolis busca incorporar una visión sistémica del contexto de los eventos, en vistas a la satisfacción del cliente, ahorro de recursos y beneficios socioambientales.
Es así que, mediante la consultoría de la especialista Fátima Langbeck, se propuso a Ñande Mariápolis adherirse al concepto de Basura Cero, que tiene como objetivo principal propagar el concepto de residuo cero.
De esta manera, en octubre se inició la Jornada Basura Cero, en la que se capacitó al cuerpo técnico de colaboradores con miras a realizar el primer Evento Basura Cero en Paraguay, con todo el apoyo de la red Basura Cero Paraguay – LATAM y en alianza con EcoOne.
Al comienzo del evento se introdujo a todos los participantes en la dinámica que se desarrollaría a través de esta metodología. Cada persona debía traer su botella o vaso reusable, con el fin de evitar el descarte del material de un solo uso. Se organizaron varios servicios, como alimentación e infraestructura, para reducir la producción de residuos.
Durante la jornada, todos los residuos generados serían dispuestos en tres partes: orgánicos, reciclables y desechos. Todo sería pesado con una recopilación de datos para elaborar un informe del impacto ambiental al finalizar el evento.
“La preparación de la Mariápolis en formato Basura Cero implicó un cambio de mentalidad para mí, darme cuenta de cuánto contaminamos realmente día a día y cuánto podemos aportar transformando nuestro lugar, ya que es un espacio donde el que nos visita tendrá la oportunidad de tomar conciencia”, dijo Fiorella Riveros, trabajadora del área comercial de Ñande Mariápolis.
Para sorpresa de los organizadores, la propuesta tuvo una adhesión inmediata de todos. Al evento asistieron alrededor de 200 personas de todas las regiones del país, con presencia de niños, adolescentes y adultos. Algunos datos fueron:
-se recopilaron 25.3 kg de basura orgánica (50 % del total);
-se recopilaron 7,40 kg de basura reciclable (14 %);
-se rechazaron 18,44 kg de basura que no se podía reutilizar (36 %).
Victoria Alvarenga, asistente de Chicos por un Mundo Unido de Paraguay, agregó: “Para mí fue muy positivo esta nueva forma en que se inició el proyecto Basura Cero con la Mariápolis, es una manera concreta de cuidar la casa común y, más aún, la casa de María en Ñande Mariápolis. Ojalá en todos los encuentros programados como este continuemos creando conciencia con las nuevas generaciones”•
por Fátima Langbeck y Luís de Jesús Navarro (Paraguay)