Música
Por Quique Figueroa (Argentina)
El guitarrista Gustavo Mozzi (Buenos Aires, 1961) despliega un repertorio bien rioplatense en este álbum, conjugando tradiciones musicales de la región. En Venturosa, traza un recorrido que va de la intimidad de un ensamble de guitarras, a la potencia de una fila de bombos de murga; de la picardía del valsecito criollo, a la huella de la música progresiva setentosa, pasando por el tango y la milonga. Dicha conjunción no es una mezcla caprichosa, sino un sutil viaje bien propuesto desde la selección de temas, su disposición en el disco, sumado a un conjunto de arreglos muy complejos, algo propio de Mozzi, un sibarita e innovador en todo sentido.
En los 80 fue uno de los pocos que se animó a darle un lugar preponderante al bombo de murga, llevándolo a escenarios y formaciones reducidas, logro sólo compartido por el visionario innovador Alejandro del Prado.
En Venturosa, Mozzi está muy bien rodeado: Mariano Rey (clarinete), Lautaro Greco (bandoneón), Damián Bolotín (violín), Abel Rogantini (piano), Esteban Sehinkman (teclados), Guido Martínez (bajo), Facundo Guevara (percusión) y Agustín Lumerman (percusión), entre otros.
Venturosa no es un punto de partida, sino la confluencia de tres trabajos anteriores: Los ojos de la noche (1998), Matiné (2005) y Estuario (2013). Es una continuidad en el espíritu y la atmósfera de estos trabajos. Basta con armar una playlist con esos cuatro trabajos, y esto se podrá respirar.
Quizá la peculiaridad de Venturosa radique en una vertiente más rioplatense, por tener aires varios de milonga y murga, vertidos en los tangos, aunque asoman otros ritmos. Afirma Gustavo Mozzi: “Venturosa lo siento como una especie de viaje a través de esos géneros que se reúnen en el Río de la Plata e incluso del Litoral. Hay en el disco ciertos aires litoraleños que le da el acordeón de Javier Acevedo. Todos estos géneros están presentes en todos los proyectos… la milonga está muy presente, porque la milonga tiene un abanico de abordajes posibles y también de acuerdo a la región; la milonga sureña aparece como en “La Noche sin Rumbo”, o la milonga urbana como “Milonga de Capablanca”, o la milonga litoraleña. Es un ritmo excluyente sobre el que se articula y se vertebra todo el disco”.
Pero la milonga no es el único ritmo, ya que también asoman murga y candombe, como en “Mar de Bombos” con Agustín Lumerman, bombista/percusionista de una formación enorme y que desarrolló la técnica del bombo de murga a un nivel exquisito. Hoy existe una generación nueva que toma este glorioso instrumento y lo proyecta. Esto es parte de una venturosa magia: trasladar el sonido de la calle al estudio de grabación y en un formato quasi camerístico.
Spotify: https://tinyurl.com/240909VenturosaOrquestaMatinee
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Epsa: https://tinyurl.com/240909GustavoMozziEpsa
Portal: www.gustavomozzi.com
